Discapacidad intelectual

A las personas que tienen una discapacidad intelectual o del desarrollo se les ha ido llamando de distintas formas a lo largo de la historia. Se van buscando los nombres menos peyorativos y estigmatizadores. Sin embargo, los cambios de nombres quedan intactos los prejuicios, ya que la discapacidad también está en la mirada del otro. Por ese motivo, en los últimos años, se está dando tanta visibilidad y películas como Campeones están haciendo una fantástica labor.

¿En qué consiste la discapacidad intelectual?

Hay que entender a las personas con sus capacidades y limitaciones concibiendo la discapacidad como la interacción entre estas y el entorno social que nos rodea. La discapacidad genera unas limitaciones en el funcionamiento humano, por lo que hay que poner énfasis en los apoyos que la persona necesita para mejorar su funcionamiento. Precisamente, en eso consiste una de las labores fundamentales del Psicólogo: averiguar que apoyos necesita la persona para mejorar su funcionamiento y como consecuencia, su calidad de vida. En PsicoTorres, contamos con instrumentos como el SIS (Escala de intensidad de apoyos) para su medición.

Criterios diagnósticos según el DSM-5.

La discapacidad intelectual es una discapacidad que se manifiesta durante el periodo de desarrollo e incluye tanto déficit en el funcionamiento intelectual como en el funcionamiento adaptativo en los dominios conceptual, social y práctico. Deben cumplirse los tres criterios:

  1. Déficit en el funcionamiento intelectual, como razonamiento, resolución de problemas, planificación, pensamiento abstracto, juicios, aprendizaje académico, y aprendizaje a partir de las experiencias, han de ser confirmados tanto por la evaluación clínica como por la aplicación individualizada de un test de inteligencia.
  2. Déficit en el funcionamiento adaptativo que implica dificultades en el cumplimiento de los estándares socioculturales y del desarrollo necesarios para tener independencia personal y responsabilidad social. Sin apoyo constante, los déficit adaptativos limitan el funcionamiento en una o más actividades de la vida diaria, como la comunicación, la participación social y la vida independiente, a lo largo de múltiples entornos tales como el hogar, el colegio, el trabajo y la comunidad.
  3. El déficit en el funcionamiento intelectual y adaptativo aparece durante el periodo del desarrollo.

En PsicoTorres podemos hacer la evaluación clínica y la medición a través de un test de inteligencia, como indica el criterio A del manual diagnóstico por el que se rige nuestra profesión. Respecto al criterio B, podemos planificar un plan de apoyos a medida de la persona que acuda a consulta y aportar apoyo psicológico tanto a el individuo como a sus familiares. En cuanto al criterio C, lo explicamos con más detenimiento a continuación.

La discapacidad intelectual a lo largo del desarrollo.

Para detectar que una persona tiene una discapacidad intelectual hay que observar su evolución a lo largo del desarrollo. Hay que prestar especial atención en su infancia a diferentes niveles de desarrollo.

  • Desarrollo cognitivo: pasan por los mismos estadios evolutivos y mismo orden pero de forma más lenta. Aunque puedan mostrar habilidades similares su razonamiento podría mostrar signos de niveles inferiores.
  • Desarrollo social y emocional: tienen problemas en la comunicación. Si la alteración es severa eso influye en la adaptación social.
  • Desarrollo motriz: en la infancia no suele mostrar diferencias pero en la vida adulta el envejecimiento es más prematuro.

Apoyos

Síndromes etiológicos que pueden dar lugar a un diagnóstico de discapacidad intelectual.

Síndrome de down.

El síndrome de down es la principal causa de discapacidad y la alteración genética humana más común que surge de forma espontánea. En lugar de tener 46 cromosomas divididos en 23 pares, las personas con síndrome de down tienen 47 cromosomas, en el par 21 existen 3 cromosomas. Por ese motivo, también es conocido como trisomía 21. Las personas con este síndrome tienen características comunes pero cada individuo es singular con una apariencia, personalidad y habilidades únicas. Existen tres tipos dentro de este síndrome:

  1. Trisomía 21 simple o pura: todas las células tienen un cromosoma 21, es la variable que más le ocurre a las personas.
  2. Translocación cromosómica: un fragmento extra de cromosoma 21 se adhiere a otro cromosoma, le ocurre al 4% de las personas con síndrome de down.
  3. Mosaicismo: solo algunas células tienen un cromosoma 21 extra y otras no, le sucede al 1% .

Se puede pensar que un psicólogo no puede ayudar a las personas con síndrome de down debido a que algunos muestran dificultades de expresión. Sin embargo, en función de las necesidades individuales y la etapa evolutiva se puede realizar un tratamiento psicológico.

Síndrome de X frágil.

El Síndrome de X frágil es una discapacidad intelectual causada por un gen específico. Es hereditario y una prueba genética lo detecta. Ese gen causa una proteína necesaria para el desarrollo cerebral, cuanto más severos sean los cambios de ese gen, mayores serán los síntomas de este síndrome. La persona con este síndrome muestra un déficit a nivel social y emocional. También está afectado su lenguaje e inteligencia. El tratamiento psicológico puede ir enfocado a mejorar su calidad de vida abordando dichas dificultades.

Síndrome de Williams.

El 75% de las personas con el síndrome de Williams suelen tener discapacidad intelectual en algún grado. Es causado cuando falta alguna copia de varios genes. Los síntomas más comunes a nivel psicológico con los que podríamos ayudar son: retraso del lenguaje y en el desarrollo, TDAH, trastorno de aprendizaje y discapacidad intelectual de leve a moderada.

Síndrome de Angelman.

El síndrome de Angelman es un trastorno genético que causa problemas con la forma en la que se desarrolla el cerebro y cuerpo. Suele ser diagnosticado entre los 6-12 meses de edad, siendo la primera vez donde se hacen visibles los problemas en el desarrollo. Realizar terapia psicológica puede ayudar a manejar la hiperactividad, los problemas de sueño y los problemas del desarrollo.

Síndrome de Prader-Willi.

El síndrome de Prader-Willi es un trastorno genético poco frecuente que provoca problemas físicos, mentales y conductuales. Un dato muy relevante para su detección es que la persona tenga una sensación constante de hambre que suele comenzar a partir de los 2 años. Puede ser diagnosticado a través de un análisis de sangre. El análisis identificaría las anomalías en los cromosomas.

El psicólogo puede ayudar con las habilidades sociales e interpersonales adecuadas para la edad. También con el control del comportamiento o trastornos asociados a este síndrome como suelen ser los trastornos del estado de ánimo o trastornos obsesivos compulsivos.

Síndrome de 5P

El síndrome de 5P también es conocido con el nombre de «Maullido de gato». Esto es así, debido a que cuando son bebés su llanto parece como el maullido de un gato. El motivo es que el bebé tiene un estrechamiento en la laringe y se va corrigiendo con el crecimiento.

Las características físicas y psicológicas que presentan son: discapacidad intelectual, retraso en el crecimiento, dificultades para comunicarse, microcefalia (cabeza pequeña) y el llanto agudo. En cuanto a la discapacidad intelectual existen grandes variaciones en cada caso y resulta ser de suma importancia la estimulación precoz.

Síndrome de deleción 22q11.

Este síndrome es una anomalía cromosómica que causa un cuadro clínico con malformaciones congénitas cuyos rasgos característicos incluyen defectos cardíacos, anomalías del paladar, dismorfismo facial, retraso en el desarrollo e inmunodeficiencia. Como psicólogos podemos resultar de utilidad con lo que respecta al retraso del desarrollo y a mejorar la calidad de vida de estas personas y sus familiares.

calidad de vida

Para concluir, queremos dejar un mensaje claro y es que la discapacidad intelectual no es fija, ni dicotómica, sino fluida, continua y cambiante de acuerdo con las limitaciones funcionales de la persona, sus capacidades y los apoyos disponibles de su entorno. Realizando una intervención enfocada en aumentar los apoyos y los servicios para estas personas, enfocada también en la inclusión comunitaria y el bienestar personal, sus limitaciones podrán disminuir.

Cuenta con el equipo de PsicoTorres para cuidar de tu calidad de vida. Estamos en Calle María Auxiliadora, nº 74, 2ºB  Pide información y tu cita en el 653234336.

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