Llevamos unas cuentas semanas de confinamiento y tener una relación de pareja nos puede resultar más complicado que de costumbre. Son tiempos difíciles, tanto si se está conviviendo, como si se está realizando cuarentena por separado. Recientemente, os hemos enseñado uno de los juegos que utilizamos en consulta para fomentar un mayor conocimiento del otro miembro de la pareja (Ver–> Juego para parejas). En esta ocasión, vamos a centrarnos en otro de los pilares básicos: LA PASIÓN.
Al amor normalmente se le asocia mucho a la pasión. Cierto es, que es uno de los componentes fundamentales junto a la intimidad y el compromiso. Sin embargo, se suele tener ideas muy distorsionadas tanto del amor como de la pasión. Socialmente, se ha creando una conciencia nueva sobre el término del amor; de ser algo «todo poderoso» ha pasado a ser algo desvirtuado a golpe de click, de aguantar lo inaguantable en nombre del «amor» hemos pasado al miedo al compromiso.
El Amor en tiempos post-modernos.
Como Bauman diría: el amor de la sociedad post- moderna es líquido y frágil. Lo que antes era seguridad hoy lo llamamos monotonía. Lo que antes era seriedad hoy lo llamamos aburrido. Ya no hay compromiso, en cuanto surgen los problemas escapamos. Somos un «envase» listo para consumir. Exprimimos una relación y nos vamos a otra. No hay duelos, solo clavos ardiendo a los que agarrarnos.
Le exigimos lo divertido a la pareja, queremos que nos sorprenda, que nos haga sentir vivos, que nos haga sentir felices. Le exigimos aquello que no podemos encontrar en nosotros mismos. La realidad es que lo que no nos podamos dar nosotros, no lo va a generar el otro.
La persona Post-moderna es una adicta al enamoramiento, esa fase tan llena de hormonas de la felicidad y tan poco duradera a largo plazo. Teme perder su individualismo, teme perder su libertad de hacer lo que quiera, cuando quiera y con quien quiera. Ama su «yo» y teme perderlo amando a un «tú». No hace nada por el otro si eso no implica un propio beneficio. Sin embargo, vive en una angustia constante porque ningún vínculo es sólido. Ningún vínculo, sabemos si va a estar mañana, por lo que miramos a la otra persona con desconfianza. No queremos ser dejados primero, nos da miedo caer en la angustia, aunque lo sustituyamos rápidamente. Vivimos en una incertidumbre permanente, no nos permitimos encontrarnos con el otro.
La pasión
En esta sociedad post-moderna, se suele confundir la pasión con la fase del enamoramiento. Pensamos que son esas «cosquillitas» en el estómago constantes. Y claro, cuando dejamos de sentirlas «es que ya no siento lo mismo» y dejamos la relación. ¿Obvio no? ya no es todo tan maravilloso como era, para qué aguantar más, no queremos malgastar nuestro tiempo en una relación en la que no sintamos ese subidón constante.
Existen muchos tipos de amor (ver en link–> El amor y sus tipologías), este que comentábamos sería el encaprichamiento si solo se fundamenta en la pasión o el amor romántico si además de pasión hay intimidad. Para tener una relación de pareja saludable deberían estar los tres componentes: pasión, intimidad y compromiso.
¿Cómo fomentar la pasión en el confinamiento?
- Disfrutar haciendo juntos pequeñas cosas como por ejemplo ver alguna película, serie o programa de televisión. En caso de estar separados, podéis verlo juntos por videollamada o comentarlo posteriormente. Hacer deporte juntos en época de confinamiento también puede ser una cita muy ideal para las parejas.
- Al final de cada día, dedicaros unos momentos para contaros como os ha ido. Incluso aunque lo hayáis pasado juntos es importante preguntar cómo se ha sentido durante el día a la otra persona. En estos tiempos, más que nunca, la expresión emocional es fundamental.
- Mostrar interés cuando la otra persona os comunique algo. Cuidar vuestro lenguaje no verbal. Es muy importante mirar a la otra persona y realizar gestos que muestren escucha activa.
- Preguntar, si no se conocen recientemente, sobre lo sueños de la otra persona y objetivos vitales.
- Explorar vuestra sexualidad, hablar sobre ella, sobre lo que os produce placer. Innovar, crear nuevos escenarios, atreveros a probar cosas nuevas.
Os recomendamos un juego para parejas denominado «Desire» que podéis utilizar en la cuarentena tanto si estáis juntos como separados. Es una aplicación que os tendríais que descargar cada uno en el teléfono móvil. El juego consiste en ir poniendo retos. Hay distintas categorías a elegir. Os dejamos un pequeño vídeo donde explican en qué consiste –> Vídeo Desire.
Os recordamos que en PsicoTorres estamos realizando terapia online. Os podéis poner en contacto a través del número de teléfono 653234336 y os informamos de todo. Estaremos encantadas de ayudaros.
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