A lo largo del desarrollo evolutivo, los niños van atravesando diferentes etapas y cambios tanto a nivel físico como psicológico. Van surgiendo cambios en el comportamiento, en el carácter, en las emociones y en su vida diaria. Todos estos cambios son normales y esperables, pero a veces no sabemos cómo enfrentarlos y es necesario pedir ayuda.
La terapia psicológica infantil es una herramienta que sirve de gran ayuda en los momentos en que nos encontramos perdidos. Desde la psicología infantil, se resuelven dudas, angustias y miedos de los padres, que, en muchas ocasiones, se sienten perdidos ante el comportamiento de los pequeños, no sabiendo si es normal o no o adecuado para la edad de sus hijos.
La terapia psicológica infantil brinda espacios adecuados para potenciar el bienestar emocional, social y psicológico de los pequeños. Dentro de este espacio se trabaja para modificar comportamientos, pensamientos, emociones y sentimientos negativos de los niños.
¿Qué Es La Terapia Psicológica Infantil?
La Psicología Infantil se compone de diferentes herramientas y técnicas para la intervención psicológica con los niños. La intervención en esta terapia va dirigida a mejorar la conducta del niño, gestionar de una manera adecuada sus emociones y aquellos temas que influyan en su desarrollo psicológico y social.
El elemento clave de la terapia infantil es el juego. A través del proceso de juego, el terapeuta crea un espacio seguro en el que generar un vínculo con el niño para poder comunicarse en su lenguaje, y así, poder entender qué le sucede, su mundo, sus preocupaciones, etc. Los niños no tienen palabras para describir y explicar lo que les ocurre, ya que ni siquiera entienden lo que les está pasando ni lo comprenden. Los niños expresan su mundo interior de otras maneras, como son con el juego y el dibujo.
En la terapia psicológica con niños, la familia tiene un papel fundamental y activo. La terapia ayuda a los padres a identificar dificultades y a aprender nuevas formas de comunicación y de relación con sus hijos. Los padres, a través de la psicoterapia infantil, actúan de modelos seguros para los hijos, enseñándoles herramientas y modos de actuación sanos.
¿Cuándo Acudir A Un Psicólogo Infantil?
En el momento que detectemos que nuestros hijos presentan comportamientos no adecuados o no esperables para su edad o momento evolutivo, o no adecuados para el entorno social que les rodea, sería recomendable acudir a un psicólogo/a infantil.
Algunas de las conductas que pueden llamar nuestra atención para acudir a psicoterapia infantil son:
- Problemas de conducta tales como agresividad, conductas oposicionistas, berrinches y pataletas desmesuradas.
- Problemas de adaptación a situaciones nuevas.
- Cambios pronunciados en la conducta y el comportamiento.
- Bajo rendimiento escolar: problemas de concentración, de atención, desinterés.
- Problemas de comunicación.
- Problemas de autoestima.
- Depresión infantil.
- Ansiedad o angustia infantil: por la separación de los padres, por ataques de pánico, por situaciones del entorno.
- Fobia social
- Fobias específicas como fobia a la oscuridad, a las arañas, etc.
- Trastorno de la conducta alimentaria en niños.
- Acoso escolar o bullying.
- Tristeza y/o aislamiento.
- Problemas vinculares.
- Abandono
- Abuso en niños
- Duelo en niños: pérdida de seres queridos, procesos de adopción, cambio de colegio, pérdida de mascotas.
- Maltrato en niños
- Problemas del sueño en niños: terrores nocturnos, pesadillas, insomnio.
¿Debemos Contarles A Los Niños Que Acudiremos A Un Psicólogo Infantil?
Es muy importante que en todo momento los niños conozcan la verdad. La mentira les genera desconfianza e inseguridad respecto a sus padres, además de aumentar la fantasía de que no son suficientes. Hay que explicarles que acudirán a un psicólogo infantil para que les ayude a sentirse mejor con ellos mismos y con sus padres, y que, además, es un signo de fortaleza.
Debemos explicarles que los psicólogos son personas que han estudiado y se han formado para ayudar a las personas a sentirse mejor en momentos complicados y no sólo cuando existe malestar mental. Debemos decirle que él no es el problema, sino que las dificultades pertenecen a toda la familia y que acudirán al psicólogo para que les ayude a estar mejor. Es la manera en la que el niño no se sienta culpable e inseguro. Los niños deben saber que estarán en todo momento arropados por sus padres.
La participación de los padres en las sesiones de psicoterapia es un factor clave para los avances y la obtención de buenos resultados. Además, la intervención temprana también favorece unos mejores resultados.
Trabajamos para la consecución de un bienestar emocional y una infancia feliz, ya que es algo fundamental para un adecuado desarrollo tanto físico, como psicológico y social del niño. No debemos olvidar que la infancia sienta las bases para nuestro comportamiento y emociones futuras.